Prof. Luis Alberto Ferreira
Resumen
Esta propuesta pedagógica se
enmarca, en forma general en la Ley de Educación Nacional N° 26206, y en la ley
N° 27535 por la cual los educandos tienen derecho a recibir educación sobre
folklore en los establecimientos educativos de todo el país. Si bien el
Ministerio de Educación de la Nación y el Consejo Federal de Educación todavía
no se han expedido con respecto a las formas de incorporar los contenidos del
folklore en los diseños curriculares nacionales, hago este aporte para que se
tenga en cuenta para su posible implementación.
Esta propuesta está basada
concretamente en un trabajo discográfico con recursos musicales, poéticos y
coreográficos folclóricos e históricos, para utilizar como materiales
motivadores en las aulas. Lo integran cuatro discos compactos de danzas
folklóricas argentinas con letras que abrevan en nuestra historia nacional y
provincial (Santa Fe). Los contenidos históricos de estas melodías están
respaldados en aparato documental e historias tomadas del pueblo en forma oral.
A modo de sugerencia,
convoco a los docentes a incorporar en la labor áulica esta propuesta de
trabajo transversal, integrando a distintas áreas a saber: Ciencias Sociales,
Ciencias Naturales, Lengua y Literatura, Formación Ética y Ciudadana y
Educación Artística. Las escuelas e institutos tienen la posibilidad de elegir
los dispositivos para su implementación: taller integrador, aprendizaje basado
en proyectos (ABP), ateneos didácticos, Proyecto educativo institucional
(P.E.I), Espacios de definición institucional (E.D.I), entre otras.
Introducción
Con
la sanción y promulgación de la Ley Nacional N° 27535/19 se abre un nuevo panorama
para el folklore, para su difusión y su enseñanza en todo el ámbito educativo
nacional. Comenzará, seguramente, el trabajo de implementación e incorporación
de contenidos a los diseños curriculares. Dichos contenidos conceptuales,
procedimentales y actitudinales se debatirán y establecerán junto a
fundamentaciones, objetivos, consideraciones metodológicas, evaluación, recursos
tales como bibliografía sugerida, documentos escritos, digitales (sonoros,
cortos, películas, narrativas trasmedia, etc.), en el seno del Ministerio de
Educación de la Nación y del Consejo Federal de Educación. También habrá aportes de todos quienes amamos “lo
antiguo y lo de siempre”[1] al decir de don Atahualpa
Yupanqui. Es justo reconocer en este
momento del desarrollo de la introducción de la propuesta, la importancia de
los trabajos de campo realizados por folklorólogos, investigadores, profesores,
difusores, artistas y gente anónima, o sea, el pueblo mismo, que estudiaron,
vivenciaron y difundieron el patrimonio
cultural de nuestra patria. Son trabajos y saberes que nos aportan una base
sólida para concretizar efectivamente la llegada del folklore a las escuelas en
cada rinconcito comarcano de la geografía nacional. Son muchos años de historia
cantada y contada desde los precursores hasta la actualidad.
Dicho
todo lo anterior, paso a desarrollar cuatro ejes fundamentales, a saber:
I.
Historia
II.
Contenidos curriculares de Folklore
III.
Abordaje de la transversalidad
IV.
A modo de propuesta
I.
Historia
La Historia es una ciencia social que estudia
las acciones humanas a través del tiempo.
Este estudio abarca tanto la historia positivista y de manuales que se
circunscribía solamente a mencionar hechos políticos, militares y la vida de
los próceres que se convertían en individualidades
históricas que, desde la mirada de los historiadores de dicha corriente, establecieron
un discurso que tan solo enumeraba hechos, fechas y nombres del pasado sin interpretarlos; que no era
inclusivo de otros sectores sociales –un pasado que, por lo general, resultaba
un pasado muerto y no vivo en la proyección del presente.[2]
En las nuevas tendencias historiográficas,
esa historia positivista fue interpelada en sus fundamentos epistemológicos,
filosóficos e historiográficos por otra corriente que revaloriza y saca a la
luz hechos y actores que integran otro sector social más amplio y con
características disímiles. Para ser más
preciso, me refiero a la irrupción de la historia social que exhuma las
vivencias de los sectores populares o, al decir de Gabriel Di Meglio, del bajo pueblo.[3] Este no es un discurso
narrativo menor para esta propuesta, ya que la resignifica y fundamenta.
Por otra parte debemos entender la
realidad histórica como compleja, con todos los elementos del entramado social
que estudiamos. Hoy los historiadores hacen historias de la vejez o la
infancia, de las ideas filosóficas, de los mercados, las formas del trabajo o el
ocio, y así al infinito.
Con este breve desarrollo de lo
histórico, que marca varios aspectos además de los científicos y pedagógicos en
cuanto a la Historia en sí, abordaremos el siguiente eje que relaciona la
propuesta con el Folklore y su aplicación en los diseños curriculares escolares.
II.
Contenidos curriculares de Folklore
Según
Ismael Moya (1972:67), “el folklore es un valor integral en la cultura … El
folklore es una geohistoria tradicional con signos diferenciales en cada
región. … [ ]. Este autor, ya en aquel
momento manifestaba que “…fallaron a menudo las proyecciones
histórico-geográficas y las informaciones de índole social y económica que
esclarecen la razón de ser de muchas variantes en las expresiones estéticas, en
los usos y en las costumbres…”. La
aseveración citada nos lleva a repensar un marco teórico para relacionar intrínsecamente
los contenidos curriculares del folklore, como material aplicado a la enseñanza
y como recurso recreativo; lo que sustentaría la factibilidad de la
transversalidad en los diseños curriculares de las distintas jurisdicciones del
país.
Actualmente
se observa una carencia en el tratamiento de los contenidos folclóricos en las
escuelas, salvo algunas excepciones. Los contenidos transversales hacen referencia
a los problemas y conflictos de nuestra realidad actual; también refieren a
valores y actitudes y son planificados y desarrollados dentro de las áreas y disciplinas
escolares.
El
espíritu de la ley N°27535 es incorporar contenidos del folklore a los diseños
curriculares vigentes que no lo tienen, o que los mencionan, solamente en
algunas áreas.
El
desarrollo de contenidos folclóricos en las instituciones educativas, con una
implementación integral así se convierte
en un valor agregado para los estudiantes, ya que lejos de ir en desmedro de
los saberes usuales, los enriquecen. En
este sentido, cada institución deberá tener autonomía para incluir mediante
diferentes dispositivos lo folclórico en las actividades áulicas. Puede ser a través de talleres, EDI, PEI,
ateneos o proyectos en los que se integren las distintas áreas y espacios
curriculares.
Es
importante decir aquí que el ámbito de aplicación de esta propuesta está
orientado a escuelas ubicadas en zonas rurales o urbanas, indistintamente.
Con
relación a la importancia de la didáctica específica del folklore recomiendo la
lectura de las obras de autores como: Ismael Moya, Augusto Raúl Cortazar,
Carlos Vega, Viggiano Esaín, Lázaro Flury, Rosita Barrera, Clara Passafari, Félix
Coluccio, Julio Carvajal, Ricardo Nervi, Silvia Dellepiane, Hebe Almeida de
Gargiulo, Martha Blache, Olga Fernandez Latour, Ana María Dupey, Mabel Ladaga, Bruno
Jacovella, Alfredo Poviña, entre otros.
En esta bibliografía, seguramente inconclusa, se podrán apreciar
diversas miradas según las épocas de edición de las obras; también sus
evoluciones y complementariedades.
Por
último, para cerrar este segundo punto quiero citar a Blache (1999:6), cuando hace
referencia a la folklorística. “… Desde su advenimiento, la revolución industrial
dio lugar a profundos y complejos cambios económicos y sociales cuyas
repercusiones fueron evaluadas desde distintos ángulos… una de tales
innovaciones llevó a algunos intelectuales a vaticinar la extinción de
múltiples formas narrativas de transmisión oral… Estos vaticinios se
intensificaron con la reciente revolución tecnológica y de los medios de
comunicación masiva… dichos pronósticos no tomaron en cuenta que la folklorística,
nació… de la trascendental transformación social representada por el
surgimiento de la modernidad…”[4] Esto seguramente dio y da
lugar a investigaciones, desarrollos y exposiciones que exceden los límites de
esta ponencia, pero fundamentan la definición de vocablos tales como Folklore y
Folklorística.
III.
Abordaje de la transversalidad
Con relación a este abordaje, comparto
una cita que deja bastante claro el tema referido a la pertinencia del Folklore
como eje transversal. Según Botero Chica
(2008): “…Los ejes transversales en educación tienen un carácter globalizante
porque atraviesan vinculan y conectan muchas asignaturas del currículo, lo cual
significan que se convierten en instrumentos
que recorren asignaturas y temas y cumplen el objetivo de tener visión
de conjunto. Además continúa diciendo que: “se constituyen en fundamentos para
la práctica pedagógica al integrar los campos del ser, el saber, el hacer y el
convivir a través de conceptos, procedimientos, valores y actitudes que orientan
la enseñanza y el aprendizaje” Aclara
asimismo que: “el enfoque transversal
no niega la importancia de las disciplinas, sino que obliga a una revisión de
las estrategias aplicadas tradicionalmente en el aula al incorporar al
currículo, en todos sus niveles, una educación significativa para el estudiante
a partir de la conexión de dichas disciplinas con los problemas sociales,
éticos y morales presentes en su entorno”.
Botero Chica nos ilustra con su explicación y agrega que: “Los ejes
transversales interactúan interdisciplinar y transdisciplinariamente, por lo
cual es necesario introducir cambios de mentalidad, empezando por cuestionar
abiertamente el carácter patrimonialista que departamentos didácticos y
docentes tienen de su materia, de la que se consideran dueños absolutos.
Botero Chica se explaya y nos habla acerca de que “Los ejes
transversales están fuertemente vinculados con las estrategias de innovación y
participación educativa. Por esta razón constituyen un campo de experimentación
privilegiado para que los colectivos de año, incluyendo padres de familia e
instituciones, colaboren en su implantación mediante actividades de apoyo al
aula de carácter educativo complementarias
que, en algún momento, pueden tener un carácter espontáneo pero que desde luego
se constituyen en parte de los modelos y proyectos educativos de la
institución.
Dentro de las ventajas que señala Botero Chica leemos que: “Los ejes
transversales contribuyen a la formación equilibrada de la personalidad,
inculcando respeto a los derechos humanos y a otras culturas, al desarrollo de
hábitos que combaten el consumismo desaforado y eliminan discriminaciones
existentes por razón de sexo, o por la pertenencia a una minoría étnica. No obstante, para lograrlo es necesario acompañar
a los ejes transversales con metodologías, acciones y estrategias que los
conviertan en instrumentos útiles y operativos…” [5] Estas citas no pretenden
dejar de lado las definiciones de transversalidad de los diseños curriculares
de cada jurisdicción, por el contrario, están aquí a los fines de contribuir al
futuro trabajo del Consejo Federal de Educación.
IV- A modo de propuesta
Seguidamente, se explicita una propuesta pedagógica como
aporte para adherir a la concreción de la inclusión transversal de los
contenidos curriculares de folklore en las escuelas.
Si
bien mi relación con lo histórico y lo folclórico es anterior, en el año 2012
comencé a trabajar en la revisión y profundización de investigaciones sobre la
historia de danzas folklóricas argentinas.
Los recursos que son la base de
esta propuesta pedagógica, poética, musical y coreográfica comenzaron a
planificarse con un proyecto de investigación y divulgación que se plasmó en
cuatro discos compactos a saber:
·
Danzas Folklóricas Argentinas, Volumen I -2013
(21 temas),
·
Danzas Folklóricas Argentinas, Volumen II
-2014 (20 temas),
·
Danzas Folklóricas Argentinas, Volumen III
-2016 (16 temas) y
·
Bajo el cielo de las danzas, Volumen IV -2018
(17 temas).[6]
En este punto del desarrollo de la
propuesta se deben hacer aclaraciones que resultan a priori necesarias:
a) Los
discos contienen danzas folclóricas tradicionales y originales, respetando su
estructura y rítmica como fueron recopiladas o editadas, en este último caso
por sus autores.
b) Las letras
respetan la estructura poética en métrica y rima requeridas para la correcta
interpretación musical y coreográfica de las danzas.
c) Existe
una relación directa entre los contenidos de Historia, Folklore y las letras de
los temas editados.
d) El
esquema de organización de los 4 discos está relacionado con los cursos de
danzas folclóricas argentinas. Se podrá
apreciar que se comienza con el gato, luego gato cuyano y así sucesivamente
hasta llegar a los cielitos.
Surge así, luego de la descripción que antecede, la intención de abordar
la temática Histórica relacionada con los saberes que provienen de la ciencia
folclórica y de la investigación regional y local, y en forma más acotada
dentro de este gran tema, la Historia de las danzas folklóricas Argentinas; y
estas a su vez, como vehículo o recurso didáctico para desarrollar contenidos
históricos a través de sus coreografías, letras y melodías.
Las
letras y melodías, en nuestra propuesta, son nuevas, contemporáneas, es decir
no son folclóricas, pero lo que sí son folclóricas son las danzas; enmarcadas
en el hermoso paisaje sonoro-visual de danzas que se bailaron y ejecutaron en
otras épocas, y en algunos pocos casos, hasta hoy se bailan y ejecutan en
sociedades localizadas regionalmente.
Este
proyecto estaría incompleto sin el acompañamiento y la participación activa de
profesores de otras áreas que ya fueron mencionadas ut supra.
También a este proyecto lo
impulsó el pedido de profesores de danzas y de educación artística, que en
reiteradas oportunidades reclamaban acerca de la necesidad de grabaciones
nuevas, con mejor sonoridad y variedad temática
para darle nuevos aires a sus actividades de enseñanza.
[1]
(1989) Grabación de la zamba Luna Tucumana. Intérpretes: Atahualpa Yupanqui en
relatos y en música y canto Los Tucu-Tucu.
[2]Romero, Luis Alberto (2002) Volver
a la Historia. Su enseñanza en el tercer ciclo de la EGB. Aique.
[4] Blache, Martha
(comp.) (1998) Folklore urbano. Vigencia
de la leyenda y los relatos tradicionales. Colihue. Buenos Aires.
[5]
Botero Chica, Carlos Alberto Los ejes
transversales como instrumento pedagógico para la formación de valores. Revista
Iberoamericana de Educación, n.º 45/2 – 10 de febrero de 2008.